El vicepresidente del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), Guillermo Caram, ve con optimismo la fórmula del presidente de la República Luis Abinader, de elaborar un proyecto de reforma fiscal que contemple bajar los impuestos, eficientar el cobro y el aumento de la formalidad de la economía.
«El Presidente Abinader abogó por una simplificación y reforma del Código Tributario, y para esto sostuvo que es necesario bajar los impuestos.
Indicó que lo que se tiene que hacer es bajar las tasas impositivas, aumentar la formalidad de la economía para que se pueda ganar más ingresos”, citó Caram.
El exgobernador del Banco Central de igual modo, dijo que el mandatario recordó la reforma fiscal de 1992, la que calificó de la más exitosa para el país, puesto que subió los ingresos tributarios indicando que dicha reforma consistió en una reducción de los impuestos.
«Convencido de la pertinencia del planteamiento del presidente Abinader conducente a una reforma tributaria, uno de los dos componentes vitales de una reforma fiscal, lanzamos la iniciativa que se aprovechan las visitas que el mandatario efectuó a líderes opositores para estructurar un marco político que viabilizara el pacto para la reforma fiscal que la Ley sobre Estrategia de Desarrollo ordenó desde el año 2012, dando un plazo de tres años para implementarlo», recordó Caram..
El también ingeniero manifestó que en adición al mandato obligatorio de la Ley, toda la comunidad económica vinculada a la situación fiscal dominicana ha postulado la necesidad de esa reforma; incluyendo organismos internacionales como FMI y Banco Mundial, nacionales como el CREES, así como la propia DGII y representantes de sectores productivos generadores de puestos de trabajo que desean contribuir al desarrollo nacional.
«Y casi todos coinciden con el presidente Abinader, que esa reforma debe ser para rebajar impuestos, nunca para aumentarlos, citando incluso algunos puntos susceptibles de estudiar tales como:
1. Reducción del ITBIS aun cuando se acompañe de ampliación de la base para no sacrificar las recaudaciones. Algunos expertos llegan a sugerir una tasa unificada del 10% para beneficiar sectores necesitados de la población, tasa que resulta más fácil de cobrar por los establecimientos y la administración, que las establecidas actualmente
2. Reducción del Impuesto sobre la Renta, adoptando tasas competitivas con las establecidas en las naciones socias comerciales de la nuestra.
3. Eliminar duplicaciones tributarias como la aplicación de varios impuestos sobre una misma transacción.
4. Eliminar impuestos que no produzcan niveles significativos de recaudaciones o inferiores a sus costos.
5. Simplificar procedimientos tributarios, incluyendo el sistema de anticipos y retenciones, especialmente sobre ingresos no percibidos
Afirma que el pacto a convocar para la reforma fiscal tendría la ventaja para el gobierno de disponer de aliados convenientes para implementar, disminuyendo el riesgo de reacciones sociales adversas, el otro componente vital de dicha reforma: reducir y reorientar el gasto para mejorarlo.
«Finalmente, el proceso de discusión del pacto, ofrecería un escenario de participación de agentes productores nacionales que estimularía las sinergias necesarias para superar la paralización económica impuesta por el gobierno anterior», concluyó Caram.