Debido a la crisis del COVID-19, la banca a nivel mundial ha despedido a 67,800 empleados en lo que va del año, influido principalmente por el cambio en la modalidad laboral de lo físico a lo virtual, que de seguir la tendencia los números se aproximarán a la cifra registrada en el 2019, cuando llegó a los 79,500, porque muchos casos no se han dado a conocer públicamente.
El conteo se hizo luego de que el gigante financiero Goldman Sachs anunciara un recorte de 400 empleos, que se suma a los más de 30 bancos en Europa, América del Norte, Asia y África que han anunciado recortes en sus plantillas, alegando las malas perspectivas en la economía, fortalecimiento de la tecnología y adaptación de las regulaciones.
El mayor porcentaje de cancelaciones lo han hecho los bancos europeos influido por la crisis financiera que redujo a cero los tipos de interés, encabezado por británico HSBC que redujo su nomina en 35, 000 empleados para bajar sus costes en casi 4,000 millones de euros.
