El representante del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en República Dominicana, Miguel Coronado, lamentó el largo tiempo que se toma para la ejecución de un préstamo en el país luego de ser aprobado, lo que ha obligado que algunos financiamientos sean cancelados para atender problemas más urgentes, porque tardan hasta dos años en el Congreso, creando retrasos en sectores importantes.
Coronado detalló que esta demora en la canalización de los recursos obligó a que en el 2018 se cancelera un préstamo de 200 millones aprobado en el 2016 para la atención a la infancia, y que otros para el sector eléctrico educación y agricultura están pendientes desde hace dos años, por lo que el multilateral trabaja en la modernización y asociación a modelos de digitalización que mejoren la eficiencia y reduzcan la burocracia.
Agregó que la pandemia del Covid-19 ha recrudecido la deficiencia sanitaria y vulnerabilidad social que ya existían en el país, dejando de lado otras enfermedades y problemas viejo como, la desigualdad social, terminación del puerto Manzanillo, el tema de nómina pública, la desproporción salarial, el manejo de la Administración Pública, entre otros para atender la crisis generada por el coronavirus.
