La disponibilidad crediticia contribuye a la estabilidad y al crecimiento de las microempresas. La Fundación Reservas del País testifica esa realidad al ver cómo miles de microempresas aumentaron sus ingresos y ahorros.
En los últimos cinco años, la entidad pública y sin fines de lucro ha aprobado RD$3,200 millones en su programa de créditos, impactando a 77,000 microempresas, el 52% propiedad de mujeres.
En palabras de su presidenta, Rosa Rita Álvarez, esos préstamos permiten el fortalecimiento o creación de 157,000 empleos alrededor del país, a través de instituciones de carácter social y solidario, como son las cooperativas de ahorros y créditos y las asociaciones sin fines de lucro que cuentan con programas crediticios.
“Ellos intermedian recursos para prestarle a sus beneficiarios. En el caso de las cooperativas, ellas captan recursos de sus socios, pero la demanda es mucho mayor que la captación que tienen. Al poder contar con mayores recursos, que es la disponibilidad que le estamos ofreciendo, ellos pueden cubrir la demanda de sus socios, más allá de lo que hubieran podido sin esos recursos”, explica.
En ese sentido, asegura que esas entidades, 49 en total, determinan quiénes son los beneficiarios y la cantidad que prestarán, con una tasa de interés de un 10%.
Algunos tienen microempresas de comercio, de servicios, agroindustria, producción y cada una de ellas tiene diferentes rubros, dependiendo de la demanda que tenga y del negocio del asociado le requiere los recursos.
De acuerdo a estudios realizados por la fundación, el comercio (colmados, restaurantes, tiendas) es el principal receptor de financiamiento, seguido de las microempresas de servicios, como por ejemplo los salones de belleza.
Además, reciben solicitud por parte de industrias, la agroindustria y microempresas relacionadas con la artesanía.
Dentro de sus observaciones, Álvarez menciona la innovación por parte de las mujeres, que se han dedicado a oficios que antes eran más vinculados a los hombres.
“Hay mujeres que tienen lava autos, talleres de repuestos, venden gomas de vehículos, de motocicletas y compran un camioncito para manejarlo ellas mismas”.
Sin embargo, destaca la diferencia entre las microempresas de mujeres y las de hombres. La cultura mantiene a las mujeres realizando una serie de quehaceres en el hogar, por lo que “el crecimiento de sus negocios no es tan cuantioso como el de los hombres. Por ejemplo, no tienen tiempo suficiente para comprar a mejores precios, hacer mercadeo de los productos y vender mejor”.
Educación financiera
Cada vez son más las personas que inician un negocio por necesidad y sin una formación de base, pero a medida que el negocio crece el propietario necesita saber cómo manejarlo.
La Fundación Reservas del País determinó que si los microempresarios reciben educación financiera pueden manejar mucho mejor sus negocios y su crédito, por lo que diseñó un programa de apoyo, en conjunto con las cooperativas y asociaciones sin fines de lucro para instruirlos sobre el tema.
“Eso significa que se van a atrasar menos y serán mejores pagadores, porque van a saber cómo manejar mejor sus negocios, cómo registrar los ingresos y egresos, si le deja beneficios o no, si pudieran ser mejor, los rubros que tendría que disminuir y si pueden conseguir materia prima a un costo menor en otro lugar, para bajar los costos y para que el beneficio sea mayor”, señala.
Álvarez resalta que la educación financiera es un apoyo importante para el desarrollo y el control de los negocios, aunque indica que microempresarios adolecen de esos conocimientos.
La entidad también ofrece asistencias técnicas a las instituciones de intermediación.
Proyectos la Fundación Reservas del País
La Fundación Reservas del País cuenta con varios proyectos en carpeta. Uno de ellos es denominado “créditos verdes”, que será otorgado a las microempresas que buscan reducir su impacto en el medio ambiente.
También está estructurando un producto para mujeres vulnerables y víctimas de violencia de género, para que puedan iniciar sus negocios.
En cuanto a tecnología, la entidad está desarrollando dos aplicaciones para instalarlas en las instituciones de intermediación, una sobre educación financiera y otra para que todo el proceso se realice a través de ese software, desde el momento de la solicitud del crédito hasta el desembolso, lo que permitirá a la institución ahorrar tiempo y tener mayores controles.
Además, busca darles la oportunidad a los socios de las cooperativas de utilizar los servicios que ofrecen los subagentes del Banco de Reservas igual que la clientela del banco.
Este año, la fundación pretende aprobar créditos por un valor de RD$400 millones para alcanzar un acumulado de RD$3,600 millones.