El Grupo Piñero apuesta por su división inmobiliaria, Bahía Principe Residences, como motor de crecimiento de la compañía. Recientemente ha destinado una inversión de 280 millones de dólares a la adquisición de terrenos para el desarrollo de esta área de negocio, mediante la que desarrollan y gestionan complejos residenciales de lujo.
“A la fecha, tenemos más de 660 residencias en construcción entre Riviera Maya (México) y Playa Nueva Romana (República Dominicana); en este último destino hay casi 330 más pendientes de inicio de sus respectivas obras. Además, contamos con terrenos en Jamaica que prevemos urbanizar en el futuro”, explica Jaime Sitjar, director general de Bahia Principe Residences & Golf.
El grupo cuenta con una cartera de cinco millones de metros cuadrados de terrenos para futuros desarrollos, de los cuales la mayor parte se encuentran en México (tres millones) y el resto se reparten entre Jamaica y República Dominicana.
A través de su División Hotelera, Bahia Principe Hoteles & Resorts, la compañía detectó el atractivo de los destinos en los que contaba con terrenos y generó de hecho una demanda de clientes repetidores que empezaron a pedirles algo más que un hotel.
“Eso nos condujo a idear en 2006 un concepto híbrido entre el hotel y la residencia, en virtud del cual esos clientes pueden adquirir o alquilar apartamentos y villas anexas a nuestros complejos y disfrutar, no solo de desarrollos inmobiliarios con estándares europeos, sino también de los servicios y amenities de nuestros hoteles: seguridad, playas de uso exclusivo, campos de golf, zonas comerciales y de restauración, instalaciones deportivas, entre otras”, detalla Sitjar.
Desde que se iniciaron en este negocio, el Grupo ha tenido un extenso recorrido en sus dos proyectos. En el caso Riviera Maya, el complejo cuenta con una superficie de 600 hectáreas, de las cuales la mitad están urbanizadas, con 3,500 propiedades de entre 300 y 2,000 metros cuadrados para las de tipo unifamiliar y entre 2,500 y 40,000 para las plurifamiliares. En total, han construido 742 residencias que se encuentran ya ocupadas, por unos 2,200 residentes, y están construyéndose otras 253 más.
Mientras tanto, el proyecto de Playa Nueva Romana se levanta sobre 652 hectáreas de terreno y está situado a medio camino entre Santo Domingo y La Romana y próximo a tres aeropuertos internacionales. Cuenta con 2,018 propiedades y en la actualidad ya dispone de 197 residencias construidas y ocupadas por unos 600 residentes. Además, están construyéndose otras 408 y hay 328 más pendientes de ejecución.
El rango de precios es muy amplio ya que puede adquirirse un solar de tipo unifamiliar a partir de 80,000 dólares, un lote plurifamiliar desde 640,000 dólares, y los apartamentos y villas más económicas empiezan en los 150,000 y 300,000 dólares, respectivamente.
En la misma línea, “el rango de inversionistas es muy amplio porque las ventajas que ofrecemos respecto a otros promotores bajan sensiblemente las barreras de entrada a este tipo de activos. Primero, porque vendemos un suelo que ya está dotado de todos los permisos y servicios, y segundo, porque ponemos a su disposición nuestra red comercial”, explica el directivo, que pone en valor su programa de rentas.
“A los propietarios de apartamentos o villas les brindamos, además, la posibilidad de darnos la gestión del alquiler turístico de su residencia para maximizar su inversión”, apunta Sitjar, que asegura que en promedio se logran rentabilidades de entre un 6% y un 7% en función del producto.
Bahía Príncipe Residences cuenta actualmente con unas 420 unidades gestionadas bajo la modalidad de “condo-hotel” y con unas 150 de alquiler vacacional. “Se trata de una línea de negocio nueva y por lo tanto en sus primeros compases de desarrollo y todavía con volúmenes bajos, pero confiamos en que crezca a gran velocidad”, concluye Sitjar.