La crisis del coronavirus ha provocado que la economía se detenga dejando en papel mojado las metas previas de los bancos quienes se preparan para revisar sus planes estratégicos en vista de los próximos años.
Santander ya ha dicho que revisa sus objetivos a medio plazo, BBVA los ha congelado y Liberbank sugiere cambios.
Los bancos trabajan internamente con varios escenarios sobre el impacto en su negocio, aunque aún no han adaptado sus estrategias, ya que empezarán a partir de junio o julio.
Por el momento, sólo Santander ha comunicado que revisará sus objetivos a mediano plazo tras la pandemia. Liberbank también ha sugerido que habrá un cambio de sus metas, al advertir de que estos compromisos se lanzaron antes de la inesperada crisis.
CaixaBank, por su parte, ha rebajado su objetivo de solvencia, medido por la ratio de máxima calidad CET1, del 12% al 11,5%. Y Sabadell ha anticipado “sacrificios”. BBVA congeló en marzo la presentación de su nueva hoja de ruta.
En ese mismo orden, Bankia ya había renunciado antes de la pandemia a su meta de beneficios para 2020 debido a que sus planes no contaban con los tipos bajos a corto plazo.
Las entidades financieras indicaron que la estrategia de los próximos años dependerá del tiempo que esté parada la economía por el confinamiento. “Ningún banco presentará un plan en las próximas semanas ni en un mes”, apunta un alto responsable de una de las grandes consultoras financieras.
Los bancos esperaban que el BCE sentara estos días las bases sobre el escenario económico más previsible tras la pandemia. Pero el supervisor comunitario dejará a cada banco que fije sus propios escenarios.
Por su parte, el BCE destacó que se ha mantenido firme en el calendario para que los bancos le remitan su planificación de capital y presupuestaria, que tienen que entregar en las próximas semanas, y que suelen marcar las estrategias.
Finalmente, los bancos reportarán en el informe los planes que tenían antes del Covid-19 y también están incluyendo distintos apéndices sobre el impacto que sufrirán en función de la evolución de la pandemia y la posterior recuperación económica.