En su reunión de política monetaria del mes de junio de 2020, el Banco Central de la República Dominicana (BCRD) decidió mantener su tasa de interés de política monetaria en 3.50% anual. Asimismo, la tasa de interés de la facilidad permanente de expansión (repos a 1 día) permanece en 4.50% anual, mientras que la tasa de interés de depósitos remunerados (overnight) se ubica en 2.50% anual.
El organismo monetario tomó la decisión sobre la tasa de referencia tras un análisis del impacto de la actual incertidumbre por la pandemia sobre la estabilidad macroeconómica y la evolución futura de la inflación.
En ese sentido, destacó que la inflación mensual de mayo fue de -0.11%, mientras que la inflación acumulada durante los cuatro primeros meses del año fue -1.25%.
Por otro lado, la inflación interanual evaluada desde el mes de mayo del 2019 a mayo del 2020, se moderó hasta 0.99%, por debajo del rango meta de 4.0% ± 1.0%, al tiempo que la inflación subyacente, que refleja las condiciones monetarias, alcanzó 3.10%.
En ese sentido, el sistema de pronósticos del BCRD señala que la inflación se recuperaría de manera gradual, ubicándose al cierre del año en torno al límite inferior del rango meta, lo cual otorga libertad a la entidad para mantener una postura de política monetaria expansiva, orientada a mitigar el impacto adverso del covid-19 sobre la economía dominicana.
El Banco Central recordó que al momento de adoptarse las medidas de contención en el país, la economía se encontraba “en una posición cíclica favorable, caracterizada por un crecimiento en torno al potencial y bajas presiones inflacionarias”.
Estos fundamentos macroeconómicos, que la entidad ha calificado como “sólidos”, han otorgado la flexibilidad para la adopción de medidas monetarias expansivas para acomodar el choque adverso.
En efecto, información preliminar del Índice Mensual de Actividad Económica (IMAE) indican que la actividad económica se ralentizó significativamente en marzo y abril en relación con el ritmo de expansión observado en los meses de enero y febrero, registrando así una variación interanual promedio acumulada de -7.5% en los primeros cuatro meses de 2020.
En este contexto, el Banco Central ha continuado implementando un conjunto de medidas monetarias y financieras orientadas a mitigar los efectos del coronavirus a través de un incremento en el financiamiento para los sectores productivos y los hogares, a menores tasas de interés.
En particular, del total de RD$ 120,000 mil millones a disposición de las entidades de intermediación financiera (equivalente a un estímulo monetario de unos 3 puntos porcentuales del PIB), se han canalizado unos RD$ 80,000 millones a través de distintas facilidades, quedando disponibles unos RD$ 40,000 millones para continuar apoyando a la actividad productiva y contribuir a una rápida recuperación de la demanda interna durante el resto del año.
Como resultado de las medidas monetarias, el Banco destacó una reducción significativa en las tasas de interés de los préstamos otorgados por la banca la banca múltiple y un mayor dinamismo en los agregados monetarios.
Asimismo, las condiciones monetarias favorables han contribuido a una aceleración del crédito al sector privado en moneda nacional que se expande por encima de 14.0% interanual, destacándose la canalización de préstamos a los sectores de manufactura, hoteles y restaurantes, comercio y construcción.
Por otro lado, el organismo monetario reconoció cómo las finanzas públicas se han afectado significativamente por la pandemia, evidenciado en una caída de los ingresos fiscales por la ralentización económica y por las facilidades de alivio tributario, así como al incremento del gasto público asociado a programas sociales orientados a preservar el empleo y a la implementación de medidas sanitaras.
En ese sentido, proyectó que el déficit del Gobierno Central aumentaría de -2.2% del PIB en el presupuesto original a -5.0% del PIB, de acuerdo a las estimaciones actualizadas contenidas en la modificación presupuestaria aprobada por el Congreso Nacional.
Por otro lado, resaltó que las medidas de provisión de liquidez en moneda extranjera por unos US$ 622 millones y las intervenciones en el mercado cambiario que se han realizado durante este año “han contribuido a suplir el menor flujo de divisas asociado a la paralización del turismo, la reducción de las remesas y la moderación de las exportaciones y de la inversión extranjera directa, en un contexto en el cual se ha incrementado notablemente la demanda de dólares por motivos precautorios ante la alta incertidumbre”.
Adicionalmente, apuntó que los niveles de reservas internacionales del BCRD permitirán que la institución pueda seguir apoyando al mercado cambiario, “de tal forma que sean cubiertas las necesidades en divisas de los agentes económicos y del público en general, contribuyendo a mantener la estabilidad relativa del tipo de cambio ante un convulso entorno internacional.
Por último, la entidad reafirmó su compromiso de mantener la estabilidad macroeconómica, dando seguimiento al impacto del covid-19 sobre la economía dominicana, para continuar reaccionando “de forma oportuna ante factores que puedan poner en riesgo el objetivo de inflación y afectar la estabilidad macroeconómica”.