El Banco Santander dejó en el pasado su cuenta 1,2,3, la que fue su producto estrella por cinco años y que ahora la sustituye por su nuevo producto Santander One, la cual unifica las tarjetas de débito y crédito, y aunque paga menos comisiones, aumenta los requisitos de vinculación del cliente que, tendrán que tener nómina domiciliada, tres recibos domiciliados y un producto de financiación.
La nueva Santander One, la cual entrará en vigencia el próximo 5 de noviembre, también sustituye a la Cuenta Día a Día, la Cuenta Zero, la Cuenta 81, la Cuenta Estándar, entre otras, pero deja activa la Cuenta Smart, Cuenta Mini y la Cuenta Básica, por lo que muchos clientes del banco cumplen con los requisitos para tener una cuenta sin tener que pagar comisiones.
En tanto, los clientes que solo tengan un producto sea de ahorros, de préstamos o protección pagarán 10 euros mensuales por el mantenimiento de la cuenta y los servicios esenciales, mientras que los clientes que no tengan productos domiciliados, ni productos contratados, pagarán 20 euros al mes.
