Deutsche Bank AG, el banco alemán que eliminó puestos de banca de inversión en Brasil el año pasado, volverá a trasladar ese negocio al país debido a que tiene una visión optimista de la agenda económica del nuevo gobierno.
Tras reducir costos en la nación latinoamericana un 40 por ciento el año pasado, Deutsche Bank mudará el negocio de operaciones de renta fija y monedas de Nueva York a São Paulo, declaró en entrevista Maite Leite, directora de país para Brasil en la compañía con sede en Fráncfort. Dos ejecutivos de banca de inversión se trasladarán allí desde Nueva York para cubrir el sector clientes y se contratará a un director como jefe local de multinacionales para la banca de transacciones globales, dijo Leite.
Estas medidas no significan que Deutsche Bank aumente la cantidad de empleados en Brasil. La empresa trasladará de 20 a 30 puestos de las divisiones de gestión de riesgos y cálculo de pérdidas y ganancias y de administración y logística del país a su centro de Jacksonville, Florida, en los próximos 18 meses. Tiene 150 empleados en el país más grande de América Latina.
“Ahora nos concentramos en los ingresos, en tratar de ampliar la magnitud de nuestras operaciones aquí en Brasil y la relevancia de nuestro negocio en el plano local y mundial”, señaló Leite.
Deutsche Bank se fue de Argentina y México en 2016 y redujo a la mitad su equipo en Brasil, trasladando las operaciones financieras a otros lugares como parte de un plan para eliminar unos 26.000 puestos de trabajo en todo el mundo en dos años. La entidad también dijo que suspendería las operaciones en Chile, Perú y Uruguay.
Clima positivo
Leite ve un “clima más positivo” en Brasil con la elección en octubre de un nuevo gobierno con propuestas que considera favorables a las empresas. El cambio político la impulsó a buscar más recursos provenientes de la compañía. Michael Spiegel, responsable mundial de Deutsche Bank para la gestión de efectivo y director regional de banca de transacciones globales para Alemania, viajó a Brasil en octubre y también quedó impresionado, dijo Leite.
La transferencia de las carteras de transacciones de renta fija y monedas de nuevo a Brasil, que comenzó en noviembre, requerirá sólo “inversiones marginales”, según Leite, porque toda la infraestructura había permanecido en el país y estaba subutilizada. No se necesitarán contrataciones para ese negocio porque el banco planea trasladar dos empleados de São Paulo a los puestos necesarios para esta iniciativa, agregó la ejecutiva.
“Ahora tenemos la capacidad de ofrecer a los clientes productos de cobertura más complejos y flexibles que antes”, dijo Ricardo Cunha, director gerente responsable del negocio de renta fija y monedas de Deutsche Bank Brasil. Mencionó como ejemplos las opciones y la cobertura de Libor en moneda local.
Cunha dijo que su objetivo para este año es aumentar los ingresos un 50 por ciento en los negocios de los que es responsable, que incluyen crédito estructurado y colocación de bonos internacionales. Espera que las políticas del nuevo gobierno estimulen el crecimiento económico, fomentando la necesidad de las compañías de captar capital, y calcula que la emisión total de bonos internacionales de empresas y bancos brasileños y del gobierno llegue a US$25.000 millones este año. Esto representa un aumento respecto de los US$15.800 millones del año pasado, de acuerdo con los datos que reunió Bloomberg.