SanSouci: Gran inversión urbanística en Santo Domingo

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Lejos de la controversia que implicó la adquisición de los terrenos de la Armada, los aportes del proyecto inmobiliario SanSouci, tal como ha sido concebido, son indiscutibles. Por un lado, los empresarios involucrados estiman que la creación de esta “mini ciudad” incrementará el producto interno bruto (PIB) en 0.33%, aportará entre 2,500 y 3,000 viviendas para disminuir el déficit habitacional, creará cerca de 7,000 empleos directos y 20,000 indirectos; beneficiará las aspiraciones de Santo Domingo como destino turístico, y servirá de modelo para el desarrollo urbano de la ciudad.

Las ambiciones parecen ser muchas, pero nada que US$1,100 millones invertidos en alrededor de 495,000 metros cuadrados no puedan conseguir, según las estimaciones de VICINI, el grupo que desde hace poco más de 10 años trabaja en la concretización de uno de sus múltiples proyectos.

Lisandro Macarrulla, presidente del proyecto SanSouci, junto a Robert Nova, director de Inversiones Turísticas SanSouci y Jaime Castilllo, director del Puerto de Santo Domingo, participaron en el Desayuno Financiero de elDinero, en el edificio que albergará al Estado Mayor de la Armada Dominicana. En el encuentro también participaron Paola Rodríguez y Héctor Incháustegui, directivos del proyecto y representantes de Vicini, socio principal.

Hasta ahora han invertido US$100 millones en el puerto y la terminal Don Diego, mientras que los US$1,000 millones restantes se irán invirtiendo progresivamente hasta 2030, cuando se espera que el proyecto esté completamente listo.

Además de las viviendas, el proyecto inmobiliario contempla la edificación de un centro de negocios, con modernas oficinas y espacios comerciales capaces de tentar a quienes viven en el Distrito Nacional a interesarse de alguna manera por esta “mini urbe” que, se espera, sea un modelo de gestión de espacios públicos. ¿Cómo? Con amplias aceras que inviten a pasear por sus espacios peatonales iluminados y seguros, a orillas del mar Caribe y el Río Ozama.

Según Macarrulla, este no será el típico complejo residencial de puertas cerradas y excesivos controles de seguridad, sino que permitirá el acceso a todos quienes deseen, claro, bajo la supervisión discreta de cámaras y agentes encargados de preservar el orden.

SanSouci espera iniciar la construcción del primer edificio del distrito corporativo en enero, una edificación de 17 pisos y 170,000 metros cuadrados de oficinas. Los ejecutivos de SanSouci apuestan a sus comodidades y precio competitivos para ganarse un espacio importante entre la oferta de la capital. Sus promotores están seguros de ello, pero antes esperan el traslado de la Armada a sus nuevas instalaciones en Boca Chica, con el fin de iniciar el primer picazo de la obra.

Luego de la construcción del edificio de oficinas, se construirá un centro de convenciones, una obra de gran importancia para la ciudad, según han coincidido los actores públicos y privados. A esto se añadirán la construcción de tres hoteles.

Además contemplan la existencia de hospitales, escuelas, bares, gimnasio y áreas deportivas. En cuanto a los accesos, Nova destaca la proximidad de SanSouci a tres de los cuatro puentes que conectan Santo Domingo Este con el Distrito Nacional. Pero, para facilitar la circulación ágil del transporte, que por demás es bastante difícil en horas determinadas, los ejecutivos del proyecto contemplan la presentación de algunas alternativas de solución vial para el acceso y la facilidad de movilidad hacia un lado y otro de las ciudad.

Macarrulla insiste en que se trata del primer proyecto en todo el Caribe con estas características. Para empezar, una extensión de terreno de estas dimensiones en el centro del Gran Santo Domingo se constituye en un atractivo urbanístico de alto potencial.

APERTURA PARA OTROS INVERSIONISTAS
Los promotores de este proyecto lo definen como una alternativa de desarrollo turístico, residencial, corporativo, comercial y cultural en un entorno vanguardista, seguro, limpio y ordenado; con áreas verdes y paisajismos que invitan a caminar y disfrutar de sus diversos ambientes con un elevado sentido de comunidad y tranquilidad.

“SanSouci, como empresa promotora del proyecto, tiene a cargo del proyecto la urbanización, es decir, la construcción de infraestructura, aceras y demás. Los desarrolladores de esas parcelas van a ser terceros, algunos asociados a nosotros”, aclaró Macarrulla. Esto quiere decir que están interesados en que más empresarios quieran invertir.

Otro de los aspectos fundamentales que toman en cuenta para permanecer tranquilos ante la congestión vial de Santo Domingo serán los controles que esperan establecerá el cabildo de la capital al tránsito por las avenidas que bordean el malecón, impidiendo el tránsito de vehículos pesados que transitarán por la avenida circunvalación que construye el Gobierno.

El Ozama y la basura: retos en el desarrollo del proyecto
El puerto de Santo Domingo tiene gran potencial e igual cantidad de retos. Se trata de una de las caras de la Primada de América, y una parte esencial del proyecto inmobiliario SanSouci.

Actualmente cuenta con una terminal de cruceros, con incrementos considerables en la cantidad de embarcaciones que atracan y el número de visitantes interesados en atravesar uno de los puentes de acceso a la Ciudad Colonial.

El principal obstáculo del puerto es la presencia constante de basura en las rutas utilizadas por los visitantes.

“El trayecto que toma el crucerista, que va desde la terminal hasta la Ciudad Colonial, necesita mejorarse”, asegura Jaime Castillo, director del Puerto de Santo Domingo.

Los ejecutivos de SanSouci están interesados en trabajar con las autoridades para mejorar el aspecto de la ciudad frente a los visitantes. Por lo cual les han planteado la necesidad de mantener la limpieza y el ornato, por lo menos, en el trayecto de los visitantes.

“Ahora tenemos que enfocarnos en los accesos a la Ciudad Colonial, en sus diferentes puertas, de manera que sean más amigables para el peatón y para los que vienen en autobuses”, comenta Castillo.

Los señalamientos que han hecho a las autoridades, además de la basura, se enfocan en la señalización, la existencia de cruces peatonales, el estado de los caminos, el mantenimiento del Puente Flotante y el paisajismo. La intención es que los visitantes sientan el deseo de regresar al país, como turistas que gastan en hospedaje, restaurantes, bares, entre otras atracciones.

“Hasta Diney ha tenido interés de venir a Santo Domingo luego de las inversiones que se han hecho, pero qué nos dicen: tienen excelentes atractivos, pero tienen que mejorar la visual y la imagen del trayecto”, revela.

Con todo, el personal del puerto sigue trabajando en la atracción de nuevas rutas de cruceros que incluyan a Santo Domingo entre los diferentes destinos en sus viajes por el Caribe.

A pesar de que gran parte de los desechos de los barrios del litoral van a parar al río Ozama, los ejecutivos de SanSouci están confiados de que esta práctica irá disminuyendo con el tiempo, gracias a programas de los cabildos para estimular el reciclaje, así como el tratamiento de aguas residuales.

Uno de los aspectos que consideran favorecedores es la construcción de la nueva Barquita, con otros estándares higiene y cuidado de uno de los recursos naturales más valiosos de la ciudad.

Según Lisandro Macarrulla, presidente de SanSouci, el proyecto inmobiliario no pretende crecer de espaldas a las comunidades aledañas en Santo Domingo Este y el Distrito Nacional. Considera que el sector empresarial debe tener presente el aspecto social de sus inversiones. Es por ello que el plan maestro de SanSouci contempla la capacitación y contratación de los habitantes cercanos.

“Vamos a hacer un levantamiento de esos recursos humanos para cada uno de los perfiles de los puestos de trabajo que vamos a tener aquí. Aquí habrá conserjes, pero también administradores de hoteles. Va a haber para todos”, describe Macarrulla.

La Armada recibirá 39,000 metros adicionales
Uno de los momentos que marcará el despegue de los trabajos de construcción en SanSouci es el traslado de la Armada hacia sus nuevos terrenos ubicados en Boca Chica.

Los directivos de SanSouci esperan que la mudanza se produzca antes de enero, con el fin de dar paso a la construcción del primer edificio de oficinas.

Según Lisandro Macarrulla, presidente de SanSouci, la Armada tendrá en Boca Chica 495,000 metros cuadrados, casi la misma cantidad de terreno que su actual sede.

Adicionales a estos, el órgano del Ministerio de Defensa tendrá 20,000 metros cuadrados en Boca Chica a orillas del mar Caribe y otros 19,000 metros cuadrados para la sede del Estado Mayor de la Armada, que estará ubicada en el terreno adquirido por SanSouci a orillas del Ozama.

La nueva ubicación de la Armada ya tiene toda la infraestructura necesaria para su funcionamiento, incluyendo una iglesia y una escuela vocacional, con el fin de integrar a la comunidad a las labores propias de la institución.

“Van a integrar la base a la comunidad y van a dar ciertos servicios, como acceso a un hospital”, explica Macarrulla.

Una vez se retire la Armada, el terreno sufrirá cambios sustanciales, como el establecimiento de un nuevo ordenamiento vial, con calles nuevas que obedecen a patrones específicos de diseño.

La vía principal conectará el Faro a Colón, en Villa Duarte, con el faro pequeño cercano a la costa. “Ese farolito hablará con la luz del Faro a Colón”, expresa el empresario. Estas calles obedecen, además, a los patrones que siguen las vías de la Ciudad Colonial, como una extensión de las mismas.

En principio se contempló la posibilidad de construir calles que obedezcan a un patrón cuadrado, pero los promotores decidieron crear la infraestructura acorde con criterios artísticos, que puedan ser más valorados por las personas.

Macarrulla destaca que este espacio de la ciudad era el ideal para la construcción de un proyecto de esta magnitud, debido a su gran extensión en el centro de la Región Metropolitana, bastante próximo al principal atractivo turístico y cultural de la capital y adornado por las aguas azules del mar Caribe.

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