Después de más de dos meses de detectarse el primer caso de covid-19 en suelo dominicano, varios sectores analizan la posibilidad de reactivar las actividades económicas, sin embargo, para el economista Raúl Ovalle mantener el distanciamiento físico y el cierre de negocios “no esenciales”, como centros de entretenimiento, es vital para evitar un rebrote del coronavirus.
“Mientras más tiempo extendamos las medidas se puede salvar más vidas y se puede permitir que haya menos contagiados, pero a la vez la economía va a sufrir una recesión mayor”, advirtió Ovalle, al indicar que de cara a un plan de reapertura se debe introducir consideraciones geográficas y de sectores productivos del país, pero con la opción de echar atrás ante un aumento grande de contagios.
Ovalle detalló que este protocolo debe considerar, además, distanciamiento a nivel de trabajo por cada uno de los sectores. De lo contrario, volver a la “normalidad”, asegura, provocaría una reincidencia del virus y un potencial colapso del sistema de salud.
El economista y catedrático de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM) abordó el tema durante su participación en el panel “Covid-19 en República Dominicana: modelos para caracterizar una guerra”, auspiciada por la Escuela de Economía de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD).
La actividad estuvo encabezada, además, por los economistas Francisco Alberto Ramírez León, profesor de la PUCMM-UASD, y Vicente Luis de Peña Peralta, catedrático de la UASD.
Ovalle recordó en que hay sectores más vulnerables que otros, por lo que se deben analizar por separado. Citó que una reactivación del turismo no sería igual que del sector construcción, ya que el primero iniciaría rezagado con la llegada de turistas.
“Hay que reconocer algo, nuestros resultados indican que todavía a esto le falta algunos meses, es decir, que probablemente hasta septiembre, ¿qué quiere decir esto?: ¿qué no deberíamos reabrir la economía en septiembre? No. Esto quiere decir, que reconociendo que todavía vamos a tener esto (covid-19) hacia septiembre con estos niveles o quizás mayor de cara a una reapertura”, enfatizó.
Reconoció que extender las medidas implementadas por el Gobierno para evitar la propagación del coronavirus, pese a ser esenciales, supone un costo fiscal y económico para el sector formal e informal.
